En tiempos en los que recién se están comenzando a dictar leyes para regular la influencia de la Inteligencia Artificial en la sociedad, Meta decidió impedir su utilización en campañas políticas en todas sus redes sociales. Esto incluye Facebook, Instagram y WhatsApp.
La noticia no es nada menor ya que se trata de tres medios de comunicación en los que muchas personas confían para informarse. El objetivo de Meta es evitar que se propaguen fake news o que se intente manipular las opiniones de la gente a través de procedimientos engañosos.
Cómo funcionará la medida de Meta sobre la IA
“A medida que continuamos probando las capacidades de la inteligencia artificial generativa en la creación de anuncios, los anunciantes que ejecutan campañas que califican como de vivienda, empleo o crédito, cuestiones sociales, elecciones o política, relacionadas con salud, productos farmacéuticos o servicios financieros no podrán acceder a ellas”, explicaron desde el Centro de Ayuda de Facebook.
Esto será aún más fuerte en épocas en las que se aproximen las elecciones. Esto quiere decir que, por ejemplo, en el caso de Argentina, los profesionales tendrían restringidas las herramientas de Meta, especialmente en Facebook, durante estos períodos. De todas maneras, el proyecto está enfocado para el 2024, el año en que se decidirá quién será el Presidente de Estados Unidos.
Cabe destacar que la empresa liderada por Mark Zuckerberg no fue la primera en regular las funciones de la Inteligencia Artificial dentro de sus propias redes sociales, sino que forma parte de una iniciativa mundial. Snapchat y Tik Tok también apostaron por limitar su utilización en temáticas que pueden volverse sensibles para los usuarios. Google, a través de Bard, hizo algo similar.
Esto fue explicado por un portavoz de Meta en diálogo con Reuters: “Este enfoque nos permitirá comprender mejor los riesgos potenciales y construir las salvaguardias adecuadas para el uso de IA generativa en anuncios relacionados con temas sensibles”.
Cómo comenzó la iniciativa
En 2015, Facebook se vio envuelta en un conflicto que se denominó “Cambridge Analytics”, que se consideró fundamental para que Donald Trump triunfara en las elecciones. Expertos determinaron que se utilizó la plataforma para publicar noticias falsas a través de sitios inexistentes que terminaron influyendo en el voto de la población.
Para evitar que esto suceda nuevamente, y tras haber recibido un pedido de la Unión Europea de comunicar sus medidas de moderación de contenido para frenar la difusión de fake news en dicho continente, Meta decidió actuar al respecto. Esta fue una solicitud que se enfatizó tras el avance de las IA Generativas que están entrenadas para crear audios, videos, textos, noticias e imágenes con altos grados de realismo.