La evolución de la tecnología trae consigo cambios que, mucha veces, impactan de manera directa ya sea sobre las industrias o sobre los puestos de trabajo. Para algunos es un problema que afecta al capital humano (la llamada crisis del empleo) pero para otros es una gran oportunidad, ya que la transformación digital y del conocimiento están, en realidad, transformando la forma en la que se trabaja. En otras palabras, ahora hay que estudiar cosas diferectes para aplicar a estos trabajos distintos que están apareciendo. En este contexto es que nace la denominada “economía del conocimiento”, un sector que hoy en la Argentina representa el 22% del PBI.
Carlos Anino, CEO de Napse Global dijo: “se trata de industrias que capitalizan el aporte del conocimiento para generar valor en sus procesos y en la calidad de sus productos y servicios”. En otras palabras, la economía del conocimiento no genera valor y riqueza por medio de su transformación en información, sino que crea valor añadido a los productos y servicios en cuyo proceso de creación o transformación participa. El abanico que conforma al sector es inmenso (desde investigación y desarrollo, diseño de software y tecnología hasta servicios biológicos, satelitales, aeroespaciales y más) y se caracteriza por su dinamismo, sobre lo cual Anino expresó: “son sectores apalancadores de los otros sectores y ayudan a impulsar la productividad de la economía en su conjunto”.
El conocimiento es muchísimo más que sólo información: la información son datos procesados con un objetivo o utilidad general,pero el conocimiento significa métodos, formas o maneras de abordar y resolver problemas, es know- how, know-who, herramientas, medios de producción para producir a la vez o más conocimiento o productos y servicios con un valor añadido, útil y cuantificable.
Más o menos a partir del año 2010 el concepto de teoría del conocimiento empezó a cambiar. La ahora llamada nueva economía del conocimiento ha dejado de enfocarse exclusivamente en el saber-cómo y en cómo sumar valor para invertir roles, pasando a ser el elemento principal de valor de productos y servicios. La nueva economía del conocimiento, la economía digital ha transformado por completo el panorama de la economía, de la mano de la ciencia de datos y el desarrollo de la inteligencia artificial, cada vez encontramos más productos y servicios virtuales que incluso ya no dependen del formato físico.