El primer viernes de diciembre, Corea del Sur lanzó un satélite espía militar que fue desarrollado por SpaceX, la compañía de Elon Musk. El hecho se produce en medio de una tensión por una carrera espacial con Corea del Norte, que es gobernado por Kim Jong-un, el líder supremo de su país desde 2011, año en que murió su padre.
La semana anterior, Kim impulsó la llegada del Malligyong-1, otro satélite espía, al espacio. Corea del Sur respondió rápidamente utilizando el Falcon 9 de SpaceX. Fue disparado desde la base de California, alcanzó la órbita con éxito y ahora ya monitorea las actividades del país vecino.
Los detalles del lanzamiento de SpaceX
Shin Won-Sik, ministro de Defensa surcoreano, fue el encargado de comunicar la noticia a los medios. Él funcionario explicó que el dispositivo superó la órbita minutos después de ser lanzado desde Vanderberg, a las 03.29 del horario de Seúl. Se espera que para el 2025 haya cuatro satélites más funcionando en el espacio y contribuyendo a aumentar su vigilancia.
“Se separó exitosamente del proyectil 11 minutos después, y se situó en su trayectoria orbital prevista”, manifestaron en un comunicado oficial del ministerio. “Hemos confirmado su comunicación con el control terrestre”, agregaron en el documento.
Cuál es el objetivo de Corea del Sur
La finalidad de poner cinco satélites en órbita para 2025 es establecer una estricta vigilancia de las actividades comandadas por Kim Jong-Un, que se presume cuenta con un programa de misiles balísticos. Los funcionarios militares surcoreanos esperan que se utilice como ojo para el sistema de ataque preventivo que se conoce como “Kill Chain”.
En este sentido, el Falcon 9 de SpaceX servirá para detectar tempranamente un posible ataque nuclear o con misiles de Corea del Sur. Cabe destacar que el Kill Chain es una plataforma capaz de descubrir posibles avances enemigos, como así también activar ofensivas preventivas con armas tierra-tierra y buque-tierra.
De hecho, algunos reportes aseguraron que el Malligyong-1, en las dos semanas que lleva actuando, ya logró tomar imágenes de instalaciones militares de Estados Unidos, como las bases de San Diego y la que se encuentra en Japón. A su vez, también fotografió el Canal de Suez, en Egipto. Esto provocó que se acelere la respuesta surcoreana.
Incluso, Corea del Norte también afirma haber tomado registros de la base militar de Estados Unidos en la isla de Guam. Por el momento, no compartieron esas imágenes, por lo que no hay certezas sobre si es verdad, parcialmente verdad o mentira. Lo mismo sucede con el espionaje en Corea del Sur, donde desde Pyongyang, la capital, amenazan con haber vigilado puntos centrales del país.