La semana pasada te contamos que SpaceX, la empresa de exploración espacial fundada por Elon Musk, tuvo que suspender momentáneamente el vuelo de prueba de Starship, tras detectar una falla en una válvula de presurización. Esta semana el lanzamiento finalmente se llevó a cabo y Starship terminó explotando cual piñata.
Este fue el primer vuelo de prueba de Starship antes de ser enviado a explorar la Luna y Marte, pero pasados pocos minutos del lanzamiento y siendo que una falla técnica previno el desprendimiento del propulsor, la nave terminó explotando en el aire.
Starship es el vehículo de lanzamiento más poderoso jamás desarrollado, tiene la capacidad de transportar hasta 150 toneladas métricas, totalmente reutilizables, y 250 toneladas métricas sustituibles. Este segundo intento por lograr un vuelo de prueba exitoso estaba programado para durar unos 90 minutos: Starship volaría durante ese tiempo, en órbita de la Tierra y aterrizaría cerca de Hawai, donde se suponía iba a sumergirse en el océano pacífico para luego ser reutilizado. El cálculo era el siguiente: aproximadamente unos dos minutos y medio después del despegue, se esperaba que el propulsor (llamado Super Heavy Rocket) hubiese gastado la mayor parte de su combustible y se desprendiera de la nave para caer al océano, pero eso no sucedió y el desenlace es el que ahora conoce todo el mundo.
Con respecto a la prueba y la explosión, Musk declaró: “Con una prueba como esta, el éxito proviene de lo que aprendemos, y la prueba de hoy nos ayudará a mejorar la confiabilidad de Starship mientras SpaceX busca hacer que la vida sea multiplanetaria”. A eso después sumó: “Como si la prueba de vuelo no fuera lo suficientemente emocionante, Starship experimentó un rápido desmontaje no programado antes de la separación de la etapa”.
Hasta ahora la iniciativa de Musk ha sufrido múltiples retrasos, incluyendo un revés cuando el año pasado la FAA (autoridad máxima en EE.UU respecto de la actividad aérea) registró el impacto ambiental generado por SpaceX en su base de Texas. A esa alteración de la agenda se le fueron sumando múltiples explosiones en los distintos lanzamientos de prueba. Pareciera que por lo pronto, ni siquiera una explosión más logrará hacer claudicar a Musk en sus intentos por llevar a la humanidad a recorrer el sistema solar.
